33ª. versión del Rally Dakar, Argentina - Chile

Y… ¡LLEGARON LOS HIERROS!

Buenos Aires, Argentina.- 30 de diciembre del 2010. - Se les cumplieron las expectativas a todos los participantes de la 33ª. versión del Rally Dakar, el tercero en territorio suramericano entre Argentina y Chile, especialmente a los integrantes del equipo Café de Colombia, quienes ya vieron rodar por calles tierra bonaerenses “los hierros” o cada uno de los vehículos entre motos, cuatrimotos, camperos, camionetas y camiones que salieron desde puerto Francés hace 25 días.

Primera tanqueada

En el caso de la dupla colombiana, el Mitsubishi Pajero en el que se va a competir en la categoría T-2 sólo se conocía a través de fotos vía internet que enviaba el francés Jerome Hardy, director del equipo. La ilusión de Juan Manuel, Camilo Andrés y el propio Alfonso, se les notaba en sus rostros cuando Jerome, como queriendo decir: “aquí está lo que les traje”, prendió la poderosa máquina y de inmediato el rugir de su motor Turbo Diesel de 3200 C.C. se hizo sentir. Los pelos se pusieron de punta.

Observando instrumentos

Camilo Andrés, navegante del equipo, a su vez comenzó a identificar cada uno de los instrumentos de navegación que ya venían instalados en la parte frontal derecha del tablero, tales como el Terratrip, el GPS con su respectivo repetidor, el Sentinel y el Iritrack. Junto con el Mitsubishi Pajero llegó también otro de igual marca sin modificaciones, el cual será utilizado por Jerome Hardy, vehículo donde viajará igualmente Alfonso Perdomo, padre de Camilo Andrés y asistente del director del equipo en camino.

Además de los vehículos, llegaron los camiones. El camión 6X6, que aunque no forma parte directa del equipo, fue contratado para que sirviera de transporte de herramientas y repuestos, además de las llantas; este camión va en la competencia participando en su respectiva categoría T-4. Así mismo desembarcó el camión 8X8, el cual prestará el servicio de asistencia técnica con su respectivo conductor y equipo de mecánicos, taller y repuestos.

La felicidad se notaba, con el mismo entusiasmo de ‘primíparos’, en muchos otros equipos europeos, asiáticos, africanos, norteamericanos y latinoamericanos al recibir cada uno sus vehículos. La faena de la tarde casi noche argentina, terminó al llegar al hotel Conquistador, casa del equipo colombiano y uno de los patrocinadores, donde el grupo de decoradores del Pajero dejara a punto y completamente uniformado el “hierro competidor” con sabor a café colombiano.